LA MUJER Y SUS PODERES.

La historia de la mujer es una historia reciente.
La problemática que plantea la historia de la mujer es compleja. En primer lugar, la pregunta inevitable que hay que plantearse es si, efectivamente, es necesaria la historia de la mujer; si ella no supone en sí misma la institucionalización de la marginación de la mujer. Para resolver la cuestión hay que asumir una evidencia muy clara: la invisibilidad histórica de la mujer en todas las historias de la humanidad que se han hecho, siempre por hombres y desde una óptica masculina excluyente de las mujeres por principio o por inercia. Ese olvido de la mitad de la humanidad ha exigido un recurso inmediato: la reivindicación de la presencia histórica de la mujer en todos los ámbitos de expresión histórica.

Esta historia figurativa, monopolizada por la derecha conservadora -siempre tan sensible a la épica de las grandes conductas, al exotismo de lo atípico, hablando de reinas y mártires-, va a dejar paso a una historia funcionalista de izquierdas, en la que se reivindica el papel de la mujer como agente movilizadora de la historia, decidida animadora de movimientos revolucionarios o reivindicativos, una historia que pretende enterrar en la galería de mitos como Mariana Pineda, Clara Campoamor, Flora Tristán, Dolores Ibárruri..., la mala imagen de lastre reaccionario que para la izquierda tenía la mujer en todos los procesos electorales.

La nueva historia de la mujer ha de superar, a nuestro juicio, esta concepción primitiva de justificarse en función de una serie de mitos personales, ya sean de derechas o de izquierdas.
La historia de la mujer debe ser la historia de las situaciones dialécticas entre el hombre y la mujer mantenidas a lo largo del tiempo y no la fatalista servidumbre que la condición femenina presuntamente impone.

Saludos a todos.

Estas líneas son fragmentos de un artículo de Ricardo García Cárcel, me ha resultado muy interesante, quizás porque yo me he dado cuenta de que las mujeres tenemos superpoderes y los desconocemos, ... y es que no sabemos que somos invisibles ... yo lo he descubierto hace muy poquito... antes pensaba que no era valorada... que sólo veían un florero que adorna... o un cumplimiento legal... que no veían más que a la madre abnegada, la mujer que limpia el hogar y va a la compra, que atiende las necesidades de todos los de la casa ... y NOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOO... ES QUE SOMOS INVISIBLES!!!

Pero yo digo y proclamo que somos algo más que eso, podrán no escucharnos, podrán no mirarnos, podrán sencillamente ignorarnos... pero ... ¿lo vamos a consentir?...

Cada una hará lo que crea que tiene que hacer... pero desde luego nunca renunciéis a vuestra condición de mujer y el valor que tiene, la capacidad femenina no tiene límites mis queridas amigas... y YA no me importa que me valoren o no... es algo que para mí ha dejado de tener importancia... yo conozco mi valía y no necesito que me la digan, tengo capacidad para tomar decisiones, sé manifestar mis opiniones y ... gracias a mis padres tengo educación y formación para saber lo que es justo y dónde puedo estar.

NO OS ACHIQUÉIS JAMÁS!!! ... ya hemos visto, porque nosotras miramos, de lo que son capaces los hombres...

Hasta pronto y sed felices y que cada una de vosotras seáis las mayores defensoras de vosotras mismas porque lo valéis. Nieves.